Desde el inicio de la pandemia en la mayoría de los hogares los integrantes de las familias, sin distinción de edad o actividad se vieron obligados a compartir mas tiempo dentro de sus casas. Ya sea por el Home Working o por los colegios funcionando de modo virtual, muchas personas prácticamente no salen de sus hogares y eso implica también cambio en sus costumbres y hábitos.
El cuidado de las mascotas es algo que será inevitable, por mucho o poco que haya que hacer, a diario debemos ocuparnos de ellas y es recomendado como actividad y para crear una responsabilidad con los niños asignarles tareas en base a lo que ellos puedan hacer.
Si hablamos de un niño muy pequeño no podemos darle una tarea o una responsabilidad, pero es el mejor momento para que nosotros realicemos las actividades de cuidado y ellos observen y les expliquemos que hacemos y para que, la repetición hará que pronto quiera participar al menos con un poco de colaboración. Lo que podemos explicarles que ellos pueden hacer es a jugar con su mascota, sin lastimarlos y con una interacción que estimulara a ambos y su vínculo.
A medida que los niños van creciendo las tareas que podemos ir poco a poco incorporando es el llenado de su tarro de comida y agua, crearle ese hábito y responsabilidad, acomodar sus juguetes, y los juegos pueden ser más elaborados o rutinas de ejercicios. En la última etapa de los niños ya podrán sacarlo a pasear (siempre supervisado por un adulto) si el perro es de bajo o mediano porte y ayudar a con su higiene.
Puede resultar en estos tiempos una linda actividad familiar, juntarse a pensar como mejorar la calidad de vida de sus mascotas cuando se dispone de más tiempo, organizar como cada miembro de la familia tomara cada tarea y realizarlas de manera rotativa para hacerlo menos rutinario.